La luz es un elemento esencial en nuestra vida, y nuestros hogares no son menos. Tener una buena iluminación en las diferentes zonas de la casa puede marcar la diferencia al crear un espacio acogedor. Ahí es donde entran los tipos de iluminación y cómo usarlos

La importancia de una buena iluminación

La luz es uno de esos elementos que, cuando hacen bien su trabajo, parecen invisibles. Y, sin embargo, cuando falta luz en una estancia es imposible no darse cuenta. La iluminación es el elemento que determina cómo percibimos el espacio. Por eso es importante saber escoger la fuente de luz y las lámparas que la interpretan.

La luz es el primer paso

Hay pocas cosas que resulten más molestas que la falta de luz o la iluminación incorrecta. Mucha gente se ha dado cuenta de esto durante el confinamiento de 2020, al pasar más horas en casa y tener que desempeñar tareas en sus propios espacios.

Uno de los principales errores a la hora de iluminar una habitación es no tener en cuenta las diferentes ocupaciones que entraña o que nos gustaría llevar a cabo en ella. Por eso, tu primer paso debe pasar inexorablemente por analizar la habitación, el espacio y sus usos. Una vez hecho esto, podrás diseñar diferentes zonas y rincones que, correctamente iluminados, te permitirán disfrutar de cada habitación de una manera mucho más rica e intensa.

¿ Luz cálida o luz fría?

En iluminación, como en la mayoría de las cosas, la importancia radica en los detalles. ¿Cuántas veces has entrado a una casa y te has sentido como en la fría sala de espera de un consultorio médico? Aquí es donde el factor de la temperatura o color de la luz juega un papel esencial.

Porque ya puedes contar con el más rico y elaborado diseño de iluminación para tu hogar, que algo aparentemente tan nimio como elegir la bombilla incorrecta logrará llevarlo al traste. Es entonces cuando surge la duda: ¿Luz cálida o luz fría?

Pues depende, como veíamos, del espacio y su uso. Por regla general, para los rincones de lectura, las mesas de trabajo, cocina, baños —sobre todo en la zona del espejo— y las mesas de comedor, se recomienda el uso de luces frías que no desvirtúen los colores. Por otro lado, para crear la iluminación ambiental de las habitaciones, lo más habitual es recurrir a la utilización de una luz cálida, que es mucho más amable y acogedora.

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10 Formas de iluminar tu casa

Si has llegado hasta aquí, probablemente tengas varias preguntas. Por ejemplo, si tienes que elegir lámparas de techo o de pie, si te conviene poner lámparas en la pared e incluso si la intensidad importa.

Todos estos son factores que, combinándolos de distintas maneras, generan diversos tipos de iluminación. Y cada tipo de iluminación cumple una función específica que debes conocer para elegir siempre la opción correcta para cada estancia. A continuación, te cuento más acerca de estos 10 tipos de iluminación para tu hogar y los espacios en donde puedes utilizarlos.

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Iluminación General

Se trata de la iluminación básica en cada estancia. Su objetivo es crear una luz uniforme y sin sombras en toda la habitación. Se soluciona con lámparas o plafones situados en el techo o con luces ascendentes que sirven para orientarnos y ver toda la estancia.

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Iluminación Puntual

Como su nombre indica, se trata de iluminar un punto específico de la estancia. Esto se logra con un foco, dirigible o fijo, situado estratégicamente para destacar un objeto de decoración o una obra de arte en una estancia. Así consigues resaltar poderosamente su forma y textura para dirigir la mirada hacia él y pueda apreciarse en buenas condiciones de iluminación.

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Iluminación Ambiental

Este tipo de luz genera una atmósfera agradable en la habitación, pero no es la principal fuente de luz. Aunque no tenga una función concreta, una iluminación tenue ayuda a crear un buen ambiente y contribuye a suavizar el contraste entre una zona iluminada y otra oscura. También es una buena manera de definir el estado de ánimo que buscas en una estancia.

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Iluminación Acogedora

Este tipo de iluminación corrige los colores de la estancia para crear un ambiente más acogedor. Por ejemplo, si las paredes y techo de una estancia son blancos y los muebles son de madera clara, conseguirías ese efecto utilizando lámparas ricas en radiaciones rojas del espectro, ya que observaríamos un aumento de coloración de los muebles hacia el marrón y un tono amarillento en las paredes. Estos colores se asocian más con una atmósfera más cómoda y agradable.

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Iluminación Integrada

El desarrollo de la tecnología LED ha aportado más riqueza a los proyectos de iluminación, ya que su diminuto tamaño facilita su integración en las superficies. Con ella se puede iluminar y delimitar ambientes sin recargar el espacio con lámparas. Por ejemplo, utilizando tiras led en los bordes de los muebles o en los lugares de paso.

Los Leds son las lámparas con un mayor rendimiento energético y mayor durabilidad, aunque no todos son iguales, por lo que conviene elegir productos de calidad y con una temperatura de color adecuada al uso que le vayamos a dar.

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Iluminación Expansiva

Este tipo de iluminación busca mitigar la sensación de estar en un espacio pequeño. Por regla general, las luces que se proyectan desde el techo elevan la mirada hacia arriba, lo que proporciona sensación de altura. Si la falta de metros es muy acuciante, lo mejor es olvidarse de las lámparas de pie y apostar por focos, plafones y apliques. Además, así también ahorrarás algo de espacio de suelo

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Iluminación Combinada

El nombre lo dice todo: se trata de combinar varios tipos de iluminación para conseguir el efecto que buscas en cada estancia. La clave para que una habitación sea acogedora y funcional está en la combinación de tres tipos de iluminación: general, ambiental y funcional. Lo ideal es alternar diferentes luminarias en varios puntos de la estancia para equilibrar el ambiente.

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Iluminación Flexible

En todas las estancias es siempre mejor que la iluminación sea flexible; es decir, que esté formada por varias fuentes de luz. En estancias como en el baño esta flexibilidad se hace imprescindible para ahorrar energía, encendiendo una sola luz para cada actividad (por ejemplo, las luces del espejo) y apagando el resto.

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Iluminación Regulable

La regulación de intensidad ofrece la doble ventaja del ahorro energético y la posibilidad de recrear varios ambientes de iluminación a partir de una sola luminaria. La luz emitida por los focos LED sí puede regularse, solo que no todos los focos tienen esta adaptación. Es importante tener en cuenta este detalle si quieres tener una iluminación flexible en tu estancia sin necesitar colocar demasiadas lámparas.

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Iluminación Conectada

Estrechamente relacionada con el punto anterior está la iluminación conectada. Gracias a que las luces LED son regulables, el control domótico de las luminarias es cada vez más intuitivo y sencillo gracias a las nuevas soluciones gestionadas desde el smartphone. Con ellas se pueden programar encendidos, crear atmósferas e incluso tener un mejor control del consumo energético.

Luz y diseño para agrandar tu casa

Una de las mayores demandas, especialmente cuando se trabaja con pisos pequeños, suele ser conseguir la sensación de espacio. Para esto, el consejo clave es conseguir una luz homogénea; de lo contrario, «es como si estuviésemos en una cueva, puede ser muy grande pero siempre da sensación de claustrofobia».

La temperatura importa

La temperatura de la luz es otro factor con el que jugar, en baños y cocinas se recomienda una temperatura muy alta que, paradójicamente, desprende luz blanca (es decir, más fría) porque se trata de estancias más funcionales. De este modo, se genera una iluminación más clara y segura para actividades que requieren concentración y precisión.

Sin embargo, para los lugares más íntimos es la luz tenue, de temperatura más baja (la que tiende a anaranjada) ya que crea ambientes más acogedores y cercanos.

Luz expansiva por zonas

Para conseguir una correcta distribución de la luz, las lámparas de pie y de sobremesa son grandes aliadas, ya que conseguirán una iluminación completa si las situamos en los lugares apropiados.

Las estancias más recomendables para matizar con «downlights, o focos empotrables, son los dormitorios, los salones y los comedores ya que pasamos la mayor parte de nuestra vida allí. El diseño de los mismos juega un papel muy importante porque es la manera en la que los espacios hablan del individuo. «El habitante de una casa quiere verse en ella, es su rincón más íntimo, pero también quiere proyectarse desde ella, mandar un mensaje a las personas a las que recibe».

Para los espacios pequeños, lo mejor es la combinación de luminarias de techo e iluminación puntual: «debe haberla, pero las lámparas tienen que ser contadas porque a veces el exceso de luz juega en detrimento de los espacios».

La luz puntual puede utilizarse para llevar la atención a los elementos clave: «tanto para despistar de un desperfecto como para mostrar un rincón en el que nos encontramos cómodos o resaltar una obra de arte».

Pero, ante todo, la regla fundamental de las luminarias es que deben ser «escogidas» y tener sentido dentro de un todo. Extravagantes, discretas, grandes o pequeñas, las lámparas de diseño conseguirán hacer de la casa un hogar.

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Una casa bien iluminada

Si estás planificando la iluminación de una casa o habitación, te será muy útil tener en cuenta esta información para crear un espacio en el que te apetezca estar y vivir.

Pero, si te gustaría tener información más específica sobre cada habitación, no te vayas muy lejos. La siguiente entrada de nuestro blog vendrá cargada de consejos específicos que te ayudarán a sacarle todo el partido a las distintas zonas de tu hogar.

Mientras tanto, puedes seguirme la pista en mis cuentas de Instagram y LinkedIn, donde nunca faltan los tips de diseño para que tu hogar sea único y funcional.

¡Nos vemos en la próxima publicación!


Recuerda que puedes encontrar muchos más trucos, consejos… en nuestras categorías de DECORACIÓN PARA PISOS PEQUEÑOS y CÓMO CONSTRUIR UNA CASA